Hay unas leyendas que todos los padres de familia se deben de saber y ¿si no? Se la deberían de saber muy bien...
La que portan los cubetas de pintura de cinco galones, "No la mantenga abierta si tiene hijos de dos años o menos", o como las que dicen algunas medicinas, detergentes y venenos, "no la deje al alcance de los niños"...
En estos casos la palabra leyenda pasa a convertirse en advertencia, y mucho ojo esto no es un mito y sí hace daño; para que después de la tragedia, del reclamo y la demanda no te encuentres que te digan, "sobre aviso no hay engaño".
Leyenda; es fabulosa palabra que en nuestra lengua, y en muchas lenguas extranjeras tiene tanto sentidos. ¿Quién en su infancia no gozó escuchar de sus abuelos aquellas historias, que pasaron a convertirse en leyendas? ¿y, a quién no le gusta escucharlas todavía, o narrarlas ya de grandes?
O, como esas leyendas de héroes "inmortales", que por sus meritos y grandes hazañas pasaron de boca en boca, por las generaciones, y de esta forma, estos héroes, siguen vivos.
Y, las leyendas de los grandes mitos; los dioses del Olimpo, por ejemplo. Y las que ya plasmaron por escrito, y tal vez sin saberlo los grandes pensadores, y escritores... ¿Quién no las conoce?
En Argentina está naciendo una leyenda.
Otras, como tantas cosas en la vida; nacen, se desarrollan por un tiempo... y después, quedan en el olvido... para dejar de serlo.
Me gusta su sentido cuando nos cuenta una "historia", un "cuento" , "¿una mentira?" es que muchas de esas leyendas son portadoras de cosas tan reales, pero atravesadas por el prisma del ingenio
Me gusta su sentido cuando se consoladiza y se hermana con la palabra héroe. Idolo, fama, inmortalidad, mito...
Leyenda, esa palabrita que tiene doble filo; es tan leyenda la persona más buena que te puedas imaginar, como la más mala; en este caso la leyenda pasa a consolidarse con la palabra fama. Hay "leyendas" que avergüenzan a sus padres, y otras, que enorgullecen tanto a la familia.
Podemos ser leyenda...
Y si te preguntara, como lo hago ahora, a ti ¿qué clase de leyenda te gustaría ser? ¿qué me contestarías?
Yo ya tengo mi respuesta.
Bienvenido a mi blog de Leyendas, ¿de Tijuana? —Sí— Aquí somos ricos en "leyendas", de todo tipo, "leyendas vivas", leyendas que luchan, leyendas que corren, que vuelan; leyendas que las trae y se vuelve a llevar el viento que nos llega desde la Rumorosa.
Leyendas de Tijuana.
Y, por que quiero que tú.... Sí, tú.... Estimada, estimado lector:
Pases a ser leyenda.
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